Época de grandes cambios

Aprovechar de las nuevas tendencias del mercado y revisar los negocios. Durante los ciclos económicos, siempre hay cambios, muchos o pocos, pero siempre. Hay que saber lo que quiere el cliente, saber evolucionar con el, para no perderlo. Todos estos cambios generan muchas ofertas y sugerencias para el cliente.

En casa, viendo alguno de los canales de television disponibles o en las chat en Internet. Cuando salimos de casa tenemos todo tipos de restaurantes, de diseño, etnico, casero etc. una moltitud increible de bares, salas multicines, con estrenos cada semana, grandes supermercados y centros comerciales, calles de moda para comprar. Para no hablar de ofertas formativas y culturales. Las ofertas crecen cada año más.

Si decidimos de salir de nuestra ciudad aparecen parques temáticos, SPAs, parques de ocio y centros comerciales con salas multicines, boleras y mucho más.

Todo con la omnipresente publicidad que nos asegurará que cualquier elección supondrá un empacho de multiples experiencias.

Desde este punto de vista parece que montar un negocio en el sector del Ocio y Turismo va a ser una opción profesional segura, así que se ha generdado una situación de casi saturación de establecimientos, ofertas, marcas y cualquiera forma de pasar el tiempo libre.

En épocas de bonanza todo es más fácil, hay clientes para todos. Pero cuando hay meno pastel a repartir … la rentabilidad de cada negocio baja, no todos sobreviven, llega la crisi económica.

En época de crisis hay una selección natural. El más capaz de conservar o renovar su clientela será el que se mantendrá. Quien no sepa diferenciarse para ser escogido, será el que cerrará.

Hay varios tipos de empresarios, entre estos dos especiales … el que espera a sus clientes y el que sale a buscarlos …

El primero es reactivo, el depende totalmente de las circustancias, tiene poco control sobre sus ingresos futuros.

El segundo terminará dominando su competencia, diferenciandose y a veces «marcando tendencia». Haciendo algo distinto, conectandose con las nuevas tendencias del consumo, no se decuida de los detalles y a los nuevos tipos de clientes que aparecen. Este empresario es el que ve más allá del «día a día»

Ahora se trata de saber estar al día de los cambios y de las novedades para ampliar nuestra linea de negocio y clientes potenciales.

Empezamos a proporcionar la mejor imágen posible de nosotros.